Con los avances de los últimos años, saber cómo hackear la clave de una red Wi-Fi se ha convertido en algo accesible para muchísimas personas. Las herramientas avanzan y, además, dispositivos como los smartphones nos lo ponen cada vez más fácil para conseguir descifrar esas claves que impiden el acceso a cualquier red inalámbrica de los millones que hay en todo el mundo.
Tú quieres aprender a hacerlo, por eso, aquí te dejamos con una guía de lo más completa. Te vamos a explicar cuándo puedes hackear contraseñas Wi-Fi, cómo puedes hacerlo y con qué herramientas, tanto en PC como en Android y en iPhone. Todo lo que necesitas saber, explicado paso a paso y con todo lujo de detalles.
Índice del artículo
Por qué hackear una contraseña Wi-Fi
Aunque pueda parecer que no, existen muchos motivos por los que una persona puede querer hackear una red Wi-Fi. Aunque en la actualidad es raro no contar con conexión a internet gracias a las tarifas de datos, pueden darse casos en los que sea urgente conectarse y no haya forma de hacerlo. Imagina, por ejemplo, que tienes que hacer una entrega urgente de un trabajo por e-mail y, de repente, te encuentras en un lugar donde no dispones de conexión, pero te topas con muchas redes inalámbricas protegidas con contraseña.
También puede suceder que estés en un sitio y tengas por delante una larga espera. En ese caso, puede que te apetezca matar un poco el tiempo buceando por la red de redes, consultando tus perfiles en redes sociales o simplemente chateando. En ese caso, también es posible que te resulte útil saber cómo hackear redes Wi-Fi para acceder a esas que están tras un muro blindado por una clave de acceso.
Un último porqué, aunque no por ello tiene que ser el menos importante, son las actualizaciones de los dispositivos. Algunos, en el momento en el que detectan que hay una nueva versión en camino para su software, se bloquean e impiden cualquier clase de uso. En esas circunstancias, huelga decir que tener acceso a una red inalámbrica para poder realizar la pertinente actualización es primordial. Aquí también te sería interesante saber cómo piratear redes para acceder, descargar y actualizar tus gadgets para que no den problemas.
¿Puedo hackear cualquier red inalámbrica?
Aunque hemos visto varios escenarios en los que hay razones de sobra para hackear redes Wi-Fi, debes saber que no puedes acceder a todas. Lo primero y más importante es que necesitas el consentimiento de su propietario para poder hacerlo ya que, en caso contrario, te puedes enfrentar a una pena que se traduzca en una sanción económica o, como sucede en algunos países, incluso en cárcel. La ley no es muy amiga de estos actos de pirateo sin consentimiento, por lo que debes tenerlo muy en cuenta a la hora de adentrarte en cualquier red wifi ajena.
Por otra parte, si quieres proceder con el hackeo desde teléfonos móviles tanto Android como iPhone, como ya te explicaremos más adelante, debes tener muy clara una cosa: su capacidad para descifrar contraseñas de redes es muy limitada. El método que se sigue normalmente para este fin es el de la fuerza bruta, con el aparato mandando miles de propuestas de contraseña siguiendo ciertos patrones hasta dar con la tecla, y eso puede traducirse en un buen puñado de horas de trabajo.
Los smartphones no tienen suficiente potencia ni capacidad para afrontar algo así, por lo que su rango de acción está mucho más limitado. Aun así, debes saber que sí pueden piratear algunas redes, pero deben cumplir unos requisitos bastante específicos y, sobre todo, no gozar de una protección excesivamente fuerte. De ser así, necesitarás un portátil o un PC de escritorio, herramientas avanzadas y, sobre todo, mucha paciencia.
¿Cuándo no puedo hackear una red?
Ya lo hemos adelantado previamente, pero, para no dejar ningún atisbo de duda, vamos a recordarlo. No debes hackear redes inalámbricas sin el consentimiento de su propietario. Puedes, por ejemplo, piratear la tuya en el caso de haber modificado la clave, haberla olvidado y no poder conectarte; puedes, de hecho, incluso piratear alguna que otra para poner a prueba sus medidas de seguridad y demostrar si es tan segura como se piensa o no. Lo que no puedes hacer es aprovecharte de las herramientas y conocimientos de hackeo para ahorrarte el pago de la conexión a internet, siempre y cuando sea sin permiso.
La ley no permite ese tipo de usos, y persigue seriamente a quienes los llevan a cabo. Ten cuidado si vas a experimentar con el hackeo de contraseñas de redes inalámbricas, debes moverte con mucha cabeza y, sobre todo, con permiso.
Cómo hackear contraseñas Wi-Fi
Sabiendo todas las consideraciones previas importantes, es el momento de abordar el quid de la cuestión. Quieres saber cómo hackear contraseñas WiFi, y te vamos a explicar cómo puedes hacerlo tanto en PC como en Android y en iPhone, aunque siendo muy conscientes de las limitaciones de estas dos últimas opciones. Debes saber que la mayoría de herramientas para llevar a cabo este proceso son gratuitas, por lo tanto, no vas a tener que preocuparte por pagar nada. Asimismo, si puedes decantarte por la opción de usar un ordenador, hazlo, ya que es la que te dará mejores resultados.
Descifrar claves Wi-Fi en PC
Descifrar contraseñas Wi-Fi en el PC es el método con más resultados que hay actualmente para obtener claves. Antes de comenzar a explicarte los pasos que tienes que seguir, debes saber algo muy importante, y es que no puedes usar el sistema operativo Windows si realmente quieres piratear redes. Vas a tener que utilizar una distribución especial de Linux, aunque ni siquiera hay que instalarla. Tan solo debe copiarse en una memoria USB y arrancar desde ella al encender el PC, el resto son unos pasos algo más complejos.
Aquí te vamos a explicar todo lo que tienes que hacer para descifrar passwords de Wi-Fi con tu ordenador:
- Asegúrate de contar con una tarjeta inalámbrica potente y descarga la distribución Kali Linux. Cuando la tengas, introdúcela en una memoria USB.
- Accede a la BIOS de tu PC pulsando una tecla concreta al encender y cambia el arranque para que comience por leer la memoria USB en primer lugar. Reinicia.
- Ahora, con la memoria introducida en el puerto USB, vuelve a encender el PC y deja que cargue el sistema operativo Linux.
- Una vez dentro, abre una terminal y escribe el comando “airmon-ng” para comprobar que tu tarjeta inalámbrica es compatible.
- Después de esto, elimina todos los procesos que no necesites y puedan interferir escribiendo “airmong-ng check kill”.
- Es el momento de activar el modo monitor para tu tarjeta Wi-Fi, en la misma ventana de comandos, introduce “airmon-ng start wlan0”, siendo cero el número de tu adaptador principal.
- Cuando se active, toca comenzar a “escuchar” a las redes. Introduce el comando “airodump-ng wlan0mon”. En el caso de que tu tarjeta tuviera el nombre de interfaz “wlan1” o con otro número, algo que puedes ver en el apartado “Interface” que aparece al efectuar el paso 6, sustitúyelo por el “wlan0” del comando que te acabamos de dar.
- Ahora verás una gran cantidad de letras y números. Tienes que buscar la red que quieres hackear, cuyo nombre aparecerá bajo la columna “ESSID”. Cuando des con ella, anota su “BSSID” y su “CH”.
- Cuando lo tengas todo apuntado, escribe el siguiente comando “airodump-ng -[CH] –bssid [BSSID] –write [Nombre archivo] wlan0mon”. Recuerda que en los sitios que hemos marcado como [CH] y [BSSID] deben ir los datos apuntados en el punto anterior. En [Nombre archivo] debes escribir el nombre del fichero donde quieres que se guarden los paquetes transferidos.
- Mientras esa ventana está trabajando, abre otro terminal. Vamos a desconectar al resto de clientes conectados a la red. Es algo que puede levantar sospechas si está siendo utilizada, pero necesario para agilizar el proceso).
- En tu nueva ventana de terminal, introduce el siguiente comando: “aireplay-ng -0 10 -a [BSSID] -e [ESSID] wlan0mon”. Recuerda que en los campos entre corchetes deben ir los datos anotados, y que wlan0mon depende de la información del punto 6.
- Cuando termine este proceso y se consiga el “handshake” (se establezca la conexión), es el momento de hallar la clave.
- Introduce este comando: “aircrack-ng [Nombre archivo] -w [Diccionario]”. En [Nombre archivo] debes escribir el nombre completo del fichero creado en el punto 9, normalmente con la extensión “.cap”. En [Diccionario] irá el nombre del fichero con el diccionario para descifrar. Busca entre los datos de la herramienta para dar con él, tiene la extensión “.txt”.
- Ahora, deja que trabaje. El proceso puede tardar desde unos minutos hasta unas horas en función del índice de seguridad de la clave.
- Cuando termine, aparecerá un mensaje con el texto “KEY FOUND !” y, a su lado, la contraseña.
Este sistema, si bien recurre a la fuerza bruta y puede tomarse su tiempo, es capaz de descifrar contraseñas que van desde las antiguas WEP hasta las robustas WPA2-AES. Es rara la ocasión en la que falla, aunque en las circunstancias más complicadas puede tardar más de un día.
Hackear contraseñas de Wi-Fi en Android
Hay varios factores importantes en cuanto al hackeo de claves Wi-Fi con Android. La base de este sistema operativo es Unix, la misma que tiene Linux, y eso le da un plus al piratear contraseñas. Aun así, para poder conseguir un buen resultado la red ha de responder a unas características muy concretas, y también tu teléfono. La mejor herramienta que hay en este sentido se llama Bcmon, aunque requiere que tengas Root instalado en tu terminal y que este tenga un chip Broadcom BCM4329 o 4330. Si no es así, tendrás que recurrir a otras opciones mucho menos capaces.
Si cumples las condiciones, entonces vamos a darte los pasos a seguir para hackear redes Wi-Fi en Android:
- Descarga e instala la app Bcmon en tu teléfono Android. Recuerda dar permisos para instalar aplicaciones de origen desconocido para evitar problemas.
- Descarga también la aplicación Reaver, es esencial para flanquear el sistema de seguridad y obtener la contraseña.
- Cuando tengas ambos, abre Bcmon y activa el modo monitor a través de la opción que lo permite.
- Después de activarse, y sin cerrar la app, abre Reaver. Confirma que no vas a usarlo con fines ilegales y, después, pulsa en el nombre del punto de acceso o red Wi-Fi que quieres hackear. Tras eso, presiona de nuevo en “Continuar” para seguir. Si algo falla, echa un vistazo a Bcmon y comprueba que ha habilitado el modo monitor bien.
- De nuevo en Reaver, marca la opción de “Configuración automática avanzada” para que se activen automáticamente los parámetros adecuados para descifrar la clave.
- Después de eso, pulsa en el botón para iniciar el ataque. Ahora, deja que tu móvil comience a trabajar.
- Con algo de suerte, en menos de 10 horas tendrás la contraseña para poder acceder a la red.
Como decíamos antes, se deben cumplir unas condiciones muy concretas para que este método funcione, ya que los teléfonos móviles no están pensados para este tipo de tareas. Si bien en Android es algo más posible gracias a su sistema operativo, ya has podido ver las exigencias en cuanto al chip. Si no cumples con ese requisito, tienes otras herramientas disponibles, pero solo suelen funcionar para redes antiguas con claves WEP o incluso para aquellas que nunca han sido modificadas, gracias a los diccionarios. En esos casos no se recurre a la fuerza bruta, por lo que el porcentaje de éxito es mucho menor.
AndroDumper App, la otra opción sin root
En el caso de que no quieras “rootear” tu móvil Android, la aplicación AndroDumper es una de las mejores que hay. Su manejo es muy sencillo, ya que solo hay que descargarla, instalarla en el terminal y pulsar en un par de botones para que funcione (“Actualización” para ver las redes, escoger la que quieres piratear y, finalmente, pulsar en “Probar conexión”). No siempre logra descifrar contraseñas, pero de todas las opciones que hay para usuarios que no tienen los chips específicos o no quieren root, es la mejor que hay actualmente.
Hackear Wi-Fi con iPhone
Si cuentas con un iPhone con Jailbreak, entonces puedes tener acceso a la app más potente para el hackeo de redes Wi-Fi, Wifi2Me. Se trata de una herramienta gratuita que permite descifrar las contraseñas de muchas de las redes inalámbricas actuales, aunque puede requerir su tiempo. Se usa especialmente para comprobar la seguridad de las wifi y ver si son realmente seguras. En el caso de que no tengas Jailbreak, no podrás usarla y te perderás todo su potencial, ya que las herramientas que habrá disponibles entonces no son ni la mitad de capaces que esta.
¿Cumples con esa condición? En ese caso, vamos a darte los pasos a seguir para piratear una red Wi-Fi con iPhone:
- Descarga e instala la aplicación de Wifi2Me para tu teléfono iPhone (también funciona en iPad).
- Abre la app una vez se haya instalado y, nada más empezar, te toparás con varias opciones.
- Comienza por escoger el botón “Networks” para ver las redes cercanas. Elige la que quieras hackear, siempre y cuando figure como compatible.
- Ahora, deja que trabaje. Verás una barra de progreso que muestra la evolución del proceso.
- Cuando acabe, aparecerá la contraseña por pantalla. Cópiala.
- Ya puedes utilizarla para conectarte.
Debes tener en cuenta que, aunque el proceso es muy simple, no todas las redes ni los routers son compatibles con este programa. Actualmente es el más potente que hay para iPhone, pero cuenta con muchas limitaciones que le impiden acercarse al rendimiento y los resultados de las herramientas de PC.
¿Puedo hackear una red Wi-Fi sin contraseña?
Aunque no es lo más habitual, ya que hay unas herramientas de lo más potentes, sí que existen algunos métodos bastante simples para hackear redes Wi-Fi sin contraseña. También hay que decir que no es el método más práctico, ni el que arroja mejores resultados, pero sí que se puede hacer, aunque impliquen tener contacto directo con el router en cuestión para poder hacer que su seguridad se debilite aún más.
Si puedes acercarte al router a la hora de hackear, tan solo tienes que pulsar el botón de WPS para que, aprovechando ese momento, cualquiera de tus dispositivos se conecte. Existen algunas apps que aprovechan esta debilidad para acceder al momento, o que incluso fuerzan al dispositivo a activar esta opción para abrir sus puertas.
Otra opción, mucho más manual y laboriosa, es resetear el router introduciendo un elemento fino en la ranura para ello. Al hacer eso, se reinicia a sus valores de fábrica y cambia su clave de acceso al Wi-Fi por una mucho más simple y estándar. En ocasiones puede ser algo tan simple como “00000000” o una secuencia alfanumérica similar. Si tienes apps gratuitas para hackear, ahora puedes aprovecharlas.
En definitiva, sí es posible piratear un wifi sin necesidad de averiguar claves, pero no es la vía más cómoda, ni la más práctica, ni la más eficaz.
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